Distancia: 5,5 Km.
Duración: 1:45 (ida y vuelta).
Tipo de ruta: no circular.
Dificultad: media.
Desnivel: 75m.
Puntos de interés: Playa de Figueiras, A Valgada, Observatorio de aves, Furna de Monteagudo.
Una vez en el cruce principal de la Isla de Monteagudo (Ruta 3), continuamos recto unos 400 m hasta llegar a la zona de A Valgada (30 min.), pequeño collado despejado de vegetación donde se encuentra el antiguo quemadero y donde si nos fijamos podemos observar los árboles retorcidos por la acción de los vientos dominantes. Seguimos la pista que poco a poco nos aproxima al pie del alto de Monteagudo, cuya característica forma da nombre a esta isla. En este punto el camino se bifurca; por la izquierda nos lleva a través de una pequeña zona arbolada, donde encontraremos las ruinas de un antiguo asentamiento isleño, hasta el observatorio de aves. Cientos de cormoranes moñudos y gaviotas patiamarillas se concentran en estas escarpadas laderas llenándolas de incesante y bulliciosa actividad en época de cría. Aunque desde aquí es visible el Faro do Peito o de Monteagudo, es necesario retroceder un poco y descender por una senda a nuestra izquierda que enlaza con el camino que lleva hasta él. La Costa da Vela y Cabo Home, tan sólo a 2,5 km, convierten a este punto en el lugar del archipiélago más cercano al continente, y al norte se divisa el suave perfil de la isla de Ons, protegiendo la Ría de Pontevedra. Bajando por una pequeña pista de cemento, nos acercamos a una pequeña furna, cueva marina producida por los embates de las olas y la particular estructura de la roca granítica, que hace que se fracture de forma vertical. En este entorno podemos observar plantas como la hierba de enamorar (Armeria pubigera) y el hinojo marino (Chritmum maritimum), que soportan condiciones de alta salinidad y viven entre las rocas.