Emisiones a la atmósfera

La emisión de sustancias contaminantes a la atmósfera, procedentes tanto de fuentes naturales como antropogénicas puede incidir en la salud de las personas, en la degradación de materiales y en los seres vivos y funcionamiento de los ecosistemas. Los diferentes grupos de sustancias y sus efectos se describen en el apartado de problemática ambiental y contaminantes.

Para evitar o minorar estos efectos perjudiciales se plantea la regulación y el control de las emisiones de determinados contaminantes, bien mediante restricciones al uso de sustancias concretas, bien mediante la regulación de las actividades potencialmente contaminadoras. Estas actividades se suelen agrupar por sectores, tales como la producción de energía, sector industrial, transporte, gestión de residuos, actividades agrarias (ganadería, uso de fertilizantes, cultivos), sin olvidar actividades domésticas (uso de pinturas o aerosoles).

Las diferentes fuentes de emisión y sus regulaciones se analizan en el apartado fuentes de emisión, así como en los dedicados a contaminantes o sectores específicos.

Cuando las superaciones de los valores límite de un contaminante sean atribuibles a fuentes naturales, no se considerarán superaciones a los efectos de cumplimiento de la normativa y no originarán obligación de ejecutar planes de actuación.

Igualmente, puede producirse un aporte natural de partículas por influencia del aerosol marino.

Las comunidades autónomas deben elaborar anualmente listas con las zonas y aglomeraciones en las que las superaciones de los valores límite de un contaminante sean atribuibles a fuentes naturales.