Inexistencia de separación entre la calzada que se extiende paralela a la línea de costa y el interior de la playa, con los correspondientes efectos negativos sobre el dominio público, en particular, su ocupación por vehículos.
La preocupación por la protección del dominio público se incrementa por la presencia en la playa de una vegetación propia característica que se ha ido degradando principalmente por la circulación de vehículos.
Se ha levantado un murete de cincuenta centímetros de altura que separa el interior de la playa y el camino asfaltado, disminuyendo así el acceso descontrolado de vehículos a la playa.
Así mismo, se ha adaptado el vial rodado para un uso compartido de peatones y vehículos en la época estival. Para ello, se ha diferenciado la mitad del ancho de la calzada con color rojo para un uso peatonal. Dicha mitad queda protegida además por una mediana de separación que se retira una vez que finaliza el verano, permitiendo entonces la circulación de vehículos en los dos sentidos.
Se ha dotado a todo el paseo de instalaciones de riego y baldeo, agua potable y alumbrado, así como de accesos a la playa con zona de duchas. En algunos puntos de la playa se han acondicionado oasis con palmeras rodeados de rocalla que se alternan con zonas de protección vegetal. Los extremos del paseo se han adecuado para un uso exclusivamente peatonal mediante el adoquinado del pavimento y la colocación de pérgolas y bancos. En el extremo occidental de la playa se ha construido un aparcamiento que da cobertura a parte del tráfico de la zona.
Situación: Terminada (2011)
Plazo: 12 meses
Presupuesto: 1.460.531,51 €
Coordenadas: 460.541,72 m E, 4.061.203,62 m N (30S)