Ecosistemas higroturbosos

 

Las turberas son hábitats que se ven directamente afectados por el cambio climático, y que requieren una atención especial puesto que, además, están muy expuestos a otros impactos importantes como es la presión que ejerce el ganado y otros herbívoros sobre ellas El excesivo uso de las turberas por parte de los herbívoros, en busca de agua y vegetación fresca, ha sufrido un fuerte incremento debido a la drástica disminución de las precipitaciones en los últimos años, que hace que estas zonas hayan experimentado un aumento de la presión que origina que una serie de plantas de alto valor ecológico, se vean amenazadas.

Disponer de turberas con cerramiento que impida el acceso a las mismas de ganado doméstico o silvestre, permite la protección de estos ecosistemas, a la vez que aporta una relevante información, al comparar con otros lugares en los que no existe esta exclusión, y permitir valorar la evolución del hábitat y el efecto real del ganado.

Se han llevado a cabo actuaciones sobre los ecosistemas higroturbosos en los siguientes parques nacionales: