El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico a través de la Confederación Hidrográfica del Júcar estrenan el corto documental El Palancia, el renacer de un río.
El video muestra cómo muchos de los problemas ambientales en la actualidad no son producto de una incompatibilidad entre usos y conservación, sino el resultado de una gestión obsoleta que debe adaptarse a las nuevas exigencias normativas y de la sociedad actual.
Se describe un problema cuyo origen se remonta a principios de la década de los 70, cuando la Confederación Hidrográfica del Júcar ejecutó unas obras de derivación en el río Palancia entre los términos municipales de Viver y Jérica en Castellón. En esta actuación se construyó un canal paralelo al río Palancia, por donde circulaba el agua evitando la infiltración al terreno en el cauce del río, sorteando 8,3 km del rio Palancia cuyo régimen hidrológico es temporal y asegurar el abastecimiento de los pequeños regadíos de la zona y mejorar así el llenado del embalse del Regajo un ubicado aguas abajo, evitando la infiltración del agua a los acuíferos de la zona.
Finalizadas las obras, las aguas del Palancia fuero derivadas mayoritariamente por el canal, quedando de río Palancia seco de forma permanente.
En el año 2013, la ONG AEMS-Ríos con vida pone de manifiesto esta situación y es entonces cuando la Confederación Hidrográfica del Júcar comienzo los trabajos de caracterización hidrogeológica con el objetivo de adoptar soluciones integradoras. Finalmente, en el año 2019, la Presidencia de la Confederación decide iniciar un periodo de pruebas con el fin de modificar la gestión hidráulica del canal trabajando de forma coordinada y colaborativa con todos los agentes afectados.
Este cambio en el modelo de gestión respeta el regadío de la zona, no afecta a los recursos hídricos gestionados desde el Embalse del Regajo y permite el libre flujo de las aguas del Palancia por su cauce.
En cuanto al tramo de río, se ha comprobado que se trata de un río temporal, y por tanto su régimen hidrológico es cambiante pudiendo encontrar diferentes tipologías de río (con caudal, pozas, o tramos secos) en función de la estación del año, del año hidrológico y del recorrido del río.
El papel de la gobernanza del agua en este proyecto ha sido la clave del éxito. Con ella se ha conseguido una interrelación equilibrada entre la Confederación Hidrográfica del Júcar y los distintos actores que ha permitido la adopción de cambios eficientes en los modelos de gestión con el fin de cumplir los objetivos de la Directiva Marco del Agua.
Si tenemos en cuenta la situación de despoblación de las zonas rurales es fácil comprender que las medidas que se adopten para la recuperación ecológica de los ríos deben venir consensuadas por los usuarios y población del territorio. Esto solo es posible con un cambio de mentalidad en la gestión del agua, no sólo por parte de la Administración, sino de toda la sociedad.
Esta medida es un ejemplo de cómo seguir adelante en la recuperación ambiental de nuestros ríos que nos marca la Directiva Marco del Agua y se refleja en la planificación hidrológica.